top of page

¿Qué esperan los pacientes de los médicos?

“No existe peor sordo

que el que no quiere oír”

Dicho popular

Con su permiso, copié el título de un artículo de la Clínica Mayo (USA) una de las más

prestigiosas por cierto 1,

y el epígrafe, extracto del saber popular, el hombre común de la calle.2

Los Servicios de Salud son necesaria e inevitablemente personales, y es por eso que como ningún otro servicio, DEBE conocer y reconocer lo que los usuarios (pacientes o clientes) esperan de él.

El objetivo de los investigadores del estudio citado 1, fue desarrollar un perfil básico de conductas médicas ideales según las opiniones de los pacientes:

Según los resultados obtenidos, el médico ideal es confiable, se compenetra con el paciente (empatía), es humano, tiene

un trato personal y es directo, respetuoso y metódico.”

En contraposición:

“Los problemas relacionados con una atención mala abarcaron desde la arrogancia del médico para educar al paciente, el desinterés en el paciente como individuo, la impaciencia para contestar las preguntas del paciente hasta dejar de analizar el pronóstico con él; en definitiva sus respuestas reflejaban los opuestos de las conductas deseadas, en especial la insensibilidad y la falta de respeto.”

Resulta analizar que en la actual “Sociedad de la información”, la fusión entre el hombre y la técnica parecen profundizarse 3

a tal punto que se confunde método complementario, estudio, análisis, etc. Como indispensable para una buena atención.

Pero, debemos oír a ese “hombre común de la calle” que nos dice que necesita una “rehumanización” del acto médico por excelencia, ese encuentro de persona con persona.

El aparato que más hizo avanzar a la ciencia médica fue sin dudas “ la silla”  Sí, no se sorprenda, señalemos algunos hechos:

1) en algún consultorio solo existen 2 sillas (se supone paciente y médico). ¿Y si va acompañado?

2) La consulta se hace directamente en la camilla (responsabilidades compartidas)

3) Algunas consultas directamente de pie (al paso)

Y el invento que más deshumanizó (no solo a la salud) fue el reloj y lo que él deriva, entiéndase expresiones como “perdida de tiempo” o “no tengo tiempo”.

Recuerdo una iniciativa oficial en la Ciudad de Ba As a fines de los 90 trayendo expertos europeos en gestión sanitaria, donde nos entregaban sendas planillas a los coordinadores de Servicios para que colocáramos el tiempo en minutos de cada procedimiento sanitario (entrevista, examen, etc.) ¡¿?!

REHUMANIZAR LA MEDICINA

Debemos reconocer la persistencia del hombre tribal, primitivo dentro nuestro, al mismo tiempo que persiste el niño interior, ambos motivo para que cada uno posea esa cuota de incultura, ignorancia, irracionalidad, necesidad mágica, la presencia en la gente

de lo sobrenatural.4

Basta con observar en cualquier periódico, aun delas ciudades más “civilizadas” la profusión de anuncios de parapsicólogos, videntes, tarotistas y aun más sencillo, el horóscopo.

La OMS. (Organización de la Salud Mundial) en su programa Salud para todos en el año 2000 (década del 70) refiere la importa

ncia comunitaria en el desarrollo de programas de salud.

¿Qué esperan los pacientes de los médicos? No hace más que confirmar que el hombre común de la calle pide en todos los rincones del planeta, un trato humanitario, compasivo de amor.

Quien quiera oír

que oiga. 

Bibliografía:

Patients' Perspectives on Ideal Physician Behaviors. Mayo Clin Proc. 2006;81(3):338-344

La Logoterapia es obvia. Francisco Bretones. Edic. San Pablo.

El hombre post orgánico. Paula Sibilia. Fondo de Cultura Económica.

Los curanderos mis colegas. Dr. Samuel Tarnopolsky. 1979

bottom of page